Luego de que un joven enfilado en el Ejército perdiera la vida por ahogamiento porque no sabía nadar, el Consejo de Estado ordenó que la instrucción de natación debe ser obligatoria para quienes ingresen a prestar el servicio militar.
“La instrucción básica que deben recibir todos los miembros de la Fuerza Pública debe incluir la natación como un componente obligatorio, pues no se puede concebir que estos servidores, encargados de cumplir con funciones tan sensibles en materia de defensa y control del orden público, donde deben enfrentar labores operativas en condiciones geográficas difíciles, deban ver limitadas sus posibilidades de acción por no saber nadar”, señala la determinación.
En su decisión el alto tribunal condenó además al Ejército Nacional a reconocer y pagar una indemnización por más de 300 millones de pesos a la familia la víctima quien falleció en lago artificial.
“Se generó un profundo dolor, angustia y aflicción a sus hermanos, teniendo en cuenta que dentro del desarrollo de la personalidad y del individuo está la de hacer parte de una familia como espacio básico de toda sociedad”, señaló la corporación.
El magistrado ponente Hernán Andrade, quien hace parte de la Sección Tercera desestimó en la sentencia los argumentos del Ejército en donde se señalaba que no tenía responsabilidad en el hecho, dado que la natación, al no ser una actividad propia de la vida castrense, no hace parte de la instrucción que se deba brindar a los soldados.
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